TRIBUNAL CIUDADANO Por: C.P. Daniel Castillo
Columna Invitada.
Hay montañas de pruebas de cómo el poder judicial se puso al servicio de los delincuentes y causó graves problemas de inseguridad, ocultó montañas de dinero en tramposos fideicomisos, se auto asignó salarios inmorales, se adueñó de cientos de plazas laborales con montañas de prestaciones que hoy defienden con uñas y dientes, y por eso no corre mucho dinero para el resto de la sociedad.
Y como si eso no bastara modificaron la Constitución Política para permanecer en el poder como VERDADEROS CACIQUES JUDICIALES, disfrazados de magistrados, ministros o jueces de acuerdo al Artículo 94 que dice “…..La remuneración que perciban….no podrá ser disminuida durante su encargo….Los ministros durarán en su encargo quince años….”.
Aquí se ve que no basta con llevarlos al poder con el voto, sino que hace falta un marco legal altamente efectivo para destituir y hasta encarcelar rápidamente a los burócrata rebeldes o corruptos que no se cansan de causarnos problemas, porque la Constitución Política y sus leyes deben estar al servicio de la gente, no al contrario; que la sociedad no esté al servicio de leyes autoritarias, ni de delincuentes burocráticos o de una Constitución Política que preserva privilegios y la impunidad burocrática.
La sociedad debe exigir a los legisladores dar retroactividad a las leyes cuando haya robo de la riqueza nacional, daños y perjuicios a la sociedad o al erario.